Con casi 30 grados de temperatura en el ambiente y lleno absoluto en el centro de la capital, el evento RedBull Showdown daba comienzo con la ansiada espera de Sergio Pérez. El show comenzó con una exhibición de Freestyle de manos de dos de los MC’s más carismáticos de todo el circuito, Arkano y Errecé, quienes tomaron a algunos de los VIP’s allí presentes como inspiración para sus rimas.
Antes del despliegue de estilo, rimas y música rap con el que los dos freestylers obsequiaron al público, algunos influencers como TheGrefg o Dani Clos tomaron parte de una pequeña carrera de karting a cargo el Karting Carlos Sainz Center.
Y por fin, una vez terminados los dos actos comentados, comenzó el evento central, con la primera salida de Checo Pérez, aunque de primeras salía sin coche por falta de volante. Volante que trajo desde el cielo Horacio Llorens, parapente profesional y deportista Red Bull.
Con todo preparado, el coche completo y el piloto dentro del cockpit, la primera de las 3 salidas del piloto mexicano ocurría. El brutal sonido del RB7 ensordeció a todos los allí presentes. Checo llenó las calles madrileñas de donuts, goma quemada y fuego que brotaba de los escapes. Tras este primer asalto del piloto de Red Bull, era el turno primero de Cristina Gutiérrez, y después de los Drift Brothers. Estos últimos tuvieron un segundo round, teniendo que entrar a cambiar neumáticos una vez por cada stint (4 juegos de neumáticos en total).
La segunda salida del piloto de Fórmula 1 se tornó diferente, al cambiar de monoplaza por el RB8 con dos luces de neón debajo del chasis que le dieron una apariencia espectacular, ya que empezaba a caer la noche madrileña. En esta segunda salida, cabe recalcar que tuvo algunos pequeños problemas para rotar el monoplaza, y tuvieron que salir los marshalls a ayudarle. Todo esto sin consecuencias para el monoplaza.
Rozando las 23h, una última aparición estelar de Checo (otra vez a bordo del RB8) dejó boquiabiertos a todos los que pudimos contemplar el espectáculo, alargando un poco el stint para el disfrute del público, y teniendo que dedicar ciertos momentos al enfriamiento del coche.
Todos los que han podido contemplar el evento han salido anonadados. Un monoplaza de combustión pura, un sonido espectacular, de los que ya no hay en la F1 moderna, un ambiente increíble con invitados del nivel del piloto español de MotoGP Marc Márquez. Si sumas todo te queda un evento espectacular, y que ha mostrado la cantidad de gente que un evento de F1 puede mover en Madrid, y que puede servir para estimaciones de cara a un plausible gran premio en la capital.