Sin embargo, existía la duda del rendimiento de los austriacos en Suzuka. La FIA había introducido una nueva regla respecto a los alerones y suelos flexibles en el GP de Singapur, lo que mucha gente asoció al tremendo bajón de Red Bull allí.
La escudería de las bebidas energéticas aseguró que no habían cambiado nada en su monoplaza pese a la nueva regla y en Japón han vuelto a estar arribar. Eso sí, las críticas y dudas de la legalidad de sus piezas ha hecho daño dentro del equipo.
Y Max Verstappen, después de conseguir una contundente pole con medio segundo de ventaja, silenció a los críticos: «Tuvimos un mal fin de semana en Singapur. Por supuesto, la gente empieza a decir ‘ah, es por culpa de las nuevas directivas técnicas’. Creo que se pueden ir a chupar un huevo«.
«En cuanto hemos puesto el coche en pista, ha sido muy agradable conducirlo, muy predecible, que es lo más importante. Vuelta tras vuelta en la clasificación fue mejorando», añadió.
Además, Verstappen señaló que su gran diferencia en la clasificación se debe a pequeños cambios que hicieron poco antes: «Despues de la FP3 vi que McLaren estaba muy cerca, pero hicimos algunos pequeños ajustes en el coche y ayudaron un poco a mejorar las sensaciones«.
