Lo que parecía que la huelga sin precedentes del sindicato en tres plantas y tres compañías de Detroit tuvieran mucho impacto, entre el United Auto Workers y los Tres de Detroit, no lo tuvo todavía.
Ni el sindicato ni los fabricantes de automóviles se acercaron más a un acuerdo durante la semana entre el inicio de las huelgas el 15 de septiembre y hoy.
Las conversaciones fueron intermitentes. Los trabajadores del UAW realizaron manifestaciones frente a plantas automotrices clave. Los ejecutivos de los fabricantes de automóviles presentaron sus ofertas salariales récord y se quejaron de que las demandas del sindicato eran insostenibles.
Eso ha cambiado
El presidente de la UAW, Shawn Fain, vestido con una camiseta de camuflaje militar para dirigirse a los miembros del sindicato, sorprendió a Wall Street al anunciar que ha habido avances sustanciales hacia un nuevo contrato con Ford, incluidos acuerdos para aumentar los pagos de participación en las ganancias y restaurar alguna forma de costo de ajuste de vida (COLA) y llevar a la división de repuestos y a los trabajadores temporales a las tarifas más altas de las plantas de ensamblaje. (Puedes ver el anuncio de Fain aquí).
Ford y el UAW no tienen un trato cerrado. Pero Ford ahora está en condiciones de establecer el marco de salarios y beneficios para los tres sindicalizados de Detroit. Las acciones de Ford subieron más del 3%.
Shawn Fain tuvo palabras y acciones más duras para General Motors y Stellantis
Dijo que alrededor de 5.600 trabajadores en 38 almacenes de distribución de repuestos de GM y Stellantis dejarán sus trabajos porque los dos fabricantes de automóviles todavía rechazan demandas clave del UAW.
Fain añadió una advertencia especial para Stellantis y les dijo a los locales de la UAW que representan las operaciones de sistemas de propulsión del fabricante de automóviles en Kokomo, Indiana, que «estén preparados».
Una huelga en las operaciones de Stellantis en Kokomo, la base de operaciones de Fain, podría cerrar la producción de varias líneas de vehículos.
La mayoría de los analistas y observadores esperaban que Fain ordenara huelgas en las fábricas de camionetas y grandes SUV de los Tres de Detroit para atacar la fuente de sus ganancias.
La decisión de cerrar operaciones de repuestos logra objetivos diferentes
Los piquetes del UAW serán visibles en 20 estados, de costa a costa, amplificando potencialmente la conciencia y el apoyo público (y político). También significa que las empresas tendrán que lidiar con clientes descontentos que se verán obligados a esperar la reparación de sus vehículos.
Estas son algunas de las cosas que debemos observar al entrar en el próximo episodio de este drama.
Los huelguistas del UAW están ganando apoyo público, según una nueva encuesta de Reuters/Ipsos. Eso es viento a favor del sindicato, como Fain señaló más de una vez durante su discurso del viernes.
El UAW también está ganando apoyo político. Tanto Donald Trump como Alexandria Ocasio-Cortez apoyan su causa, al igual que el presidente Joe Biden. ¿Podría el UAW sacar provecho de esto en los debates políticos sobre los vehículos eléctricos?
Los proveedores están sufriendo. Han comenzado los despidos en los proveedores de las tres plantas ensambladoras en huelga. Las cosas podrían empeorar para las empresas proveedoras y sus trabajadores si, después de todo, el UAW decide hacer huelga en las fábricas de camiones de los Tres de Detroit.
A los huelguistas del UAW les esperan tiempos difíciles.
Los miembros del sindicato en huelga recibirán 500 dólares semanales del fondo de huelga del sindicato. Pero eso está muy por debajo del salario completo. A finales de este mes, las empresas podrían cortar la cobertura sanitaria. Hay muchos desafíos que enfrentarán los miembros del UAW en una huelga prolongada.
El progreso en Ford muestra que se puede llegar a un acuerdo. Algunos elementos de la agenda del sindicato son asequibles para las empresas. Los cálculos aproximados sugieren que los tres fabricantes de automóviles podrían elevar los salarios de todos los trabajadores del UAW que no están en la tarifa horaria más alta hasta ese nivel por menos de mil millones de dólares al año, combinados.
¿Pero restaurar las pensiones de beneficios definidos como exige el UAW?
Eso podría costar miles de millones y alejar futuros empleos de las plantas de la UAW. Fain no mencionó las pensiones ni la exigencia de una semana laboral de 32 horas en su charla.
La productividad es el tema latente en las conversaciones.
La mano de obra les va a costar más a los Tres de Detroit. Cuánto más dependerá de acelerar la productividad para compensar salarios más altos y mejores beneficios. Tesla está estableciendo nuevos puntos de referencia en el sector manufacturero, con salarios un 25% por debajo de los niveles actuales del UAW.
Los fabricantes de automóviles de Detroit y el UAW tendrán que igualar a Tesla, o correr el riesgo de perder más ventas y empleos. ¿Podría el UAW organizar las fábricas de Tesla en Estados Unidos para nivelar el campo de juego? Todavía no lo han hecho.
