Aún queda casi un mes para que se celebre el Gran Premio de México de F1 de 2023, del 27 al 29 de octubre, pero sus organizadores han preferido curarse en salud. No quieren que se repitan las escenas de 2022, cuando algunos aficionados silbaron a Lewis Hamilton y Max Verstappen.
Los rectores de la cita mexicana saben que estos silbidos dan mala imagen a una cita, por otro lado, bien valorada por la propia F1 y la FIA. El calor de sus gradas y la pasión de sus aficionados tiene sus cosas buenas, pero también, desmedida, alguna mala.
Por ello, el propio GP de México ha lanzado una campaña para concienciar, sobre todo a los fans de Sergio Checo Pérez, de no pitar a los rivales.
Lo hicieron con un vídeo que se hizo público desde el circuito Hermanos Rodríguez, de México DF. En él aparece Juan Manuel Correa, el piloto de F2 y embajador de la prueba.
Pasión contenida
«F1 es pasión, competencia y rivalidad, a veces con el enfrentamiento en la pista es fácil expresar la pasión de forma incorrecta. Es por ello que lanzamos el movimiento ‘Racepect’, con el objetivo de fomentar el respeto entre los que conformamos esta gran comunidad», se dice en él.
«A veces, con el enfrentamiento en la pista, es fácil perder la cabeza. El calor de la competencia sube a las gradas, donde es sencillo expresar la pasión de forma incorrecta. Esto no es Fórmula 1. En Fórmula 1 celebramos el éxito de todos y mantenemos una revalidad sana entre los pilotos y equipos», sigue.
«Así nace ‘Racepect’, un juego de palabras que combina ‘race’ (carrera) y ‘respect’ (respeto), generando un movimiento en el que invitamos a todos a dejar la rivalidad en la pista. Lo que pasa en la pista se queda en la pista», dice Juan Manuel Correa.