La producción de los Toyota Land Cruiser, RAV4 y otros modelos más de la marca japonesa se suspendió indefinidamente en seis de las plantas domésticas ubicadas en Japón. Esta vez, la suspensión estuvo relacionada con un accidente presentado a uno de los proveedores. Sin las piezas completas en la fábrica, no había manera de seguir operando.
En agosto de este año se presentó una situación similar, en la que Toyota cerró temporalmente todas sus fábricas japonesas debido a problemas con los proveedores, a raíz de un falla en el sistema de pedidos. Esta vez, los retrasos se atribuyen a una explosión en la planta de un proveedor de resortes que hirió a dos trabajadores. Las causas de los hechos aún siguen siendo materia de investigación.
Pero ¿por qué Toyota tiene detener repentinamente su producción por estos motivos? Todo se debe principalmente a que la automotriz japonesa, trabaja bajo un estricto sistema de suministros. Su método de adquisión de piezas en tiempo real hace que su inventario tenga apenas lo necesario, y si bien permite ahorrar en gastos, se corren riesgos operativos, como estos.
Tener sus centros de producción cerrados, no le significará a Toyota otra cosa sino el retraso en la construcción de sus vehículos y en las entregas finales al consumidor. Se calcula que con seis de sus 14 fábricas locales cerradas , se pueden dejar salir por lo menos 4.000 vehículos diarios. Lo que afecta el abastecimiento mundial, teniendo en cuenta que Japón se encarga de un tercio del rendimiento global.
Con amplios volúmenes de producción en todo el mundo (200.000 ejemplares a la semana), Toyota fue el mayor productor de vehículos en 2022, alcanzando 10 millones de unidades, superando incluso la escasez de microcomponentes. A principios de este año también había sido blanco de un ciberataque que lo obligó a detener al producción, siendo este el tercer episodio en un año.
Aún así, Toyota parece superar victoriosamente las dificultades y en lo que va corrido de 2023, mantiene el liderato en el sector de ventas a particulares. El éxito comercial de sus vehículos ha llevado a que se generen listas de espera de incluso años, para recibir el vehículo. Casos como los de Land Cruiser 300 y ahora el Camry Hybrid en Australia.