Posiblemente, quien diga que con una moto eléctrica no se puede viajar es porque, o bien no quiere asumir la realidad hacia la que se encamina nuestro mercado, o bien nunca ha probado una moto eléctrica actual. Todos estamos de acuerdo en que viajar en moto siempre tiene un encanto especial, sea con el tipo de moto que sea, pero aunque es verdad que cuando se viaja con una moto eléctrica la preparación y el enfoque deben ser algo diferentes, eso no significa que no sea totalmente factible.
Las motos eléctricas están ganando terreno en el mundo de las dos ruedas gracias al ahorro en gasolina que suponen, a sus beneficios medioambientales, a su bajo coste de mantenimiento y a su conducción potente y suave. No obstante, la autonomía y la infraestructura de recarga siguen siendo los principales desafíos a la hora de planear un viaje largo, por lo que podemos encontrar nuevos condicionantes en nuestra ruta que hasta ahora no nos habíamos planteado.
Por eso, si estás pensando en lanzarte a la carretera con una moto eléctrica, una buena planificación se vuelve imprescindible. No es lo mismo parar en cualquier gasolinera y llenar el depósito en cuestión de minutos que depender de una red de puntos de recarga que aún está en expansión. Pero por suerte, cada vez más motoristas se animan a dar el salto a la movilidad eléctrica y eso es más claro síntoma de que cada vez es más fácil moverse con un vehículo que no sea de combustión.
Antes de cargar tu equipaje y salir a devorar kilómetros, te contamos qué aspectos debes tener en cuenta al viajar con una moto eléctrica para que tu experiencia sea lo más satisfactoria posible. Con una moto eléctrica moderna, como puede ser una Zero DSR/X, una Zero S, una Zero FXE o cualquiera de sus hermanas, verás que con los consejos adecuados, podrás disfrutar de una ruta sin ningún tipo de preocupaciones.
La autonomía: el principal reto de las motos eléctricas
Uno de los primeros factores que todo motorista eléctrico debe tener en cuenta es la autonomía de la moto. Las motos de combustión tienen décadas de evolución a sus espaldas y para ellas eso ya no es un problema, pero verás que con una moto eléctrica como la Zero DSR/X, que en ciudad consigue una autonomía de casi 300 km, en carretera tampoco hay mayor preocupación aunque evidentemente dependa de la velocidad a la que viajemos, como con una moto con motor de combustión. Basta con ser conscientes de la capacidad de nuestra batería y de que variará según nuestro estilo de conducción y la carga que llevemos con nosotros.
La autonomía real de una moto eléctrica puede cambiar considerablemente según la velocidad, las pendientes o incluso las condiciones meteorológicas. Viajar a alta velocidad, por ejemplo, puede consumir mucho más energía que ir a una velocidad moderada pero constante. Además, si viajas por carreteras de montaña has de tener en cuenta que podrás aprovechar la frenada regenerativa de tu moto y recuperar carga mientras conduces.
- Consejo: Juega y prueba con los diferentes modos de conducción hasta conseguir el que mejor se adapta a tus necesidades y nivel de carga de tu batería. Es mejor una velocidad mantenida que un ritmo con acelerones constantes.
La red de estaciones de recarga
El siguiente aspecto esencial es saber dónde recargar tu moto. Aunque la infraestructura de cargadores para motos y coches eléctricos está en constante crecimiento, aún no es tan extensa como las gasolineras convencionales. Esto hace que la planificación de paradas para recargar sea una parte a tener muy en cuenta durante el viaje. Afortunadamente, existen apps y webs especializadas, como Electromaps, que te permiten localizar los puntos de recarga disponibles en tu ruta.
Además, si utilizas Google Maps, la aplicación te permite configurar tu perfil para especificar que viajas con un vehículo eléctrico y, además de planificar la ruta en consecuencia, te permite buscar puntos de recarga compatibles.
Ten en cuenta que no todas las estaciones de carga ofrecen la misma velocidad. Algunos cargadores son rápidos y pueden cargar tu batería en menos de una hora, mientras que otros pueden requerir varias horas. Esto también es importante al elegir dónde parar.
- Consejo: Planea tu ruta de manera que elijas alojamientos que ofrezcan puntos de recarga, así podrás dejar la moto enchufada por la noche y tenerla lista por la mañana. A la hora de elegir restaurantes también puedes aprovechar para elegir los que estén preparados para recibir vehículos eléctricos.
Tiempo de recarga: aprovecha las paradas estratégicas
A diferencia de las motos de combustión, donde una parada para repostar no suele llevar más de unos minutos, las motos eléctricas requieren algo más de tiempo para recargar completamente la batería. Por eso, es recomendable planificar las paradas en lugares donde puedas aprovechar el tiempo, como restaurantes, áreas de descanso o puntos turísticos.
Una Zero DSR/X tiene un tiempo de recarga óptimo de 1,1 horas, pero en caso de necesidad podrías cargarla de noche en aproximadamente 4,5 horas conectándola a cualquier toma de corriente doméstica, como si fuera un teléfono móvil. En todo caso, si vas a hacer un viaje largo es fundamental integrar las paradas de recarga dentro de tu itinerario, de manera que aproveches el tiempo de espera para descansar, comer o disfrutar de algún monumento.
- Consejo: Si haces paradas largas, como para comer o explorar un pueblo, opta por estaciones de carga lenta, que suelen ser más accesibles. Para paradas rápidas, busca cargadores de alta potencia, aunque suelen estar en puntos específicos como áreas de servicio de autopistas.
Lleva un plan B para la recarga
Aunque planifiques bien tu ruta y verifiques los puntos de recarga, siempre puede haber imprevistos, como que una estación esté ocupada o fuera de servicio. Tener un plan B es fundamental para evitar quedarte tirado sin batería en el peor momento.
- Consejo: Lleva siempre una lista de puntos de recarga alternativos en tu ruta o cercanos y ten claro cuál es la distancia máxima que puedes recorrer con la batería restante.
El clima y su impacto en la batería
El clima es otro factor clave cuando se viaja con una moto eléctrica. Las bajas temperaturas pueden reducir ligeramente la capacidad de la batería, mientras que en climas cálidos, aunque la autonomía puede ser más alta, la moto también se calentará más, al igual que te pasaría a ti sobre cualquier tipo de moto. Por lo tanto, es importante tener en cuenta el clima previsto en tu ruta, y si es posible, ajustar tu itinerario para evitar las condiciones más extremas.
- Consejo: En invierno, planifica rutas más cortas o con más paradas de recarga. Durante las paradas, recargar la batería la batería a una temperatura óptima puede ayudarte a mantener una mejor autonomía.