Max Verstappen podría ser penalizado por un cambio de motor en el Gran Premio de Brasil del próximo de semana, con Red Bull preocupado por su falta de velocidad en línea recta.
El neerlandés lo pasó mal en el GP de México, con problemas en el motor durante los entrenamientos del viernes que lo obligaron a cambiar la unidad de potencia para el resto del fin de semana.
Y aunque el uso de su motor de reserva evitó nuevos problemas mecánicos, su alto kilometraje significó una disminución de su rendimiento y perjudicó al tricampeón del mundo en la carrera.
Las cifras de velocidad en la recta de salida/llegada, antes de que se active el DRS, mostraron que Verstappen alcanzó los 251,4 km/h, muy por detrás de su compañero de equipo Sergio Pérez, con 253,4 km/h.
Verstappen fue el segundo más lento de todos en la primera trampa intermedia de velocidad, registrando 299,6km/h en comparación con Pérez en 303,1 y su rival por el título Lando Norris en 307,9km/h.
Con Red Bull ya en la cuerda floja con su RB20 luchando por igualar la forma en carrera de Ferrari y McLaren, el equipo sabe que probablemente necesita comprometerse con una unidad de potencia fresca para ayudar a impulsar las esperanzas de Verstappen, e Interlagos tiene sentido porque es una pista donde los adelantamientos son más fáciles.
Mientras que el punto clave de conversación después de la carrera para Verstappen fue sobre sus sanciones por infracciones de conducción contra Norris, Red Bull dice que la falta de velocidad es una preocupación mucho mayor.
El asesor de deportivo de Red Bull, Helmut Marko, dijo: «Más alarmante es que no pudimos hacer funcionar los neumáticos, tanto el medio como el duro».
«No estábamos ni cerca de los dos equipos de delante, y supongo que parte del problema es que el viernes no pudimos girar por los problemas de motor».
«Tenemos que hacer algo, eso está claro. También tendremos que cambiar el motor porque éramos muy lentos en la recta».
«Este motor, que estaba en el coche, no debía estar en el coche, así que lo más probable es que en Brasil pueda pasar (un cambio de motor)».
En declaraciones a la emisora austriaca ORF, Marko dijo que el motor que Verstappen utilizó en la carrera de México sólo había sido pensado para ser utilizado en las sesiones de práctica durante el resto de la campaña.
«El motor que teníamos ahí ya no estaba pensado para la carrera, y cuanto más envejece un motor, más disminuye su rendimiento», dijo.
«La penalización sería de cinco puestos. Eso no sería tan grave en Brasil, por ejemplo, donde se puede adelantar con relativa facilidad. Pero vimos que perdíamos entre tres y ocho km/h en las rectas».
Verstappen tiene actualmente una ventaja de 47 puntos sobre Norris en el campeonato, y cualquier penalización de motor solo significaría una sanción en la parrilla para el gran premio principal en lugar de la carrera sprint que Brasil tendrá el sábado.
