En el Rally Dakar, la primera prueba del Campeonato del Mundo de Rally Raid de 2025, competirán coches con diferentes conceptos de motor en la clase superior (T1 Ultimate). La FIA se basa en un nuevo método para controlar el equilibrio de prestaciones para 2025.
El Dacia Sandrider está propulsado por un motor V6 biturbo de tres litros de cilindrada. La base del motor procede del Nissan Z. Toyota confía en un motor V6 biturbo de 3,5 litros para el Hilux. La base procede de un Land Cruiser 300.
El nuevo Ford Raptor monta un motor V8 Coyote Darkhorse de cinco litros de cilindrada. X-raid ha desarrollado un motor en línea de seis cilindros y tres litros de cilindrada para el Mini JCW Rally 3.0i.
Y Century confía en un motor Audi V6 biturbo de 2,9 litros de cilindrada para el CR7.+ La velocidad máxima está limitada a 170 km/h en la clase T1. El peso mínimo es de 2.010 kilogramos.
El factor decisivo es el par motor y la rapidez con la que se puede alcanzar la velocidad máxima. Hasta ahora, la FIA regulaba la potencia del motor controlando la presión del turbocompresor y utilizando limitadores de caudal de aire. Ahora se hace de otra manera.
Para permitir una competición justa entre los diferentes conceptos, la FIA utilizará un torquímetro en 2025. Este es el sistema principal para supervisar y controlar la potencia de propulsión en la clase Ultimate.
Este torquímetro se acopla a la caja de cambios y los datos fluyen al registrador de datos de la FIA. Esto permite controlar y ajustar el rendimiento de los vehículos con motores turboalimentados y atmosféricos.
El Ford Raptor tiene un motor V8 atmosférico de cinco litros.
Foto: Kin Marcin / Red Bull Content Pool
En el reglamento de 2025, el torquímetro se define en el artículo 13.3.+ Este dispositivo de medición es obligatorio para los coches T1 con pilotos Platinum o Gold. Antes de la temporada, la FIA definió una curva de par motor para cada coche.
La Comisión de la FIA del Campeonato del Mundo de Rally Raid puede realizar cambios en los parámetros en cualquier momento durante un rally a propuesta del Delegado Técnico de la FIA. Estas decisiones son definitivas e inapelables.
El Anexo I del Reglamento Deportivo enumera las sanciones por infracciones en caso de superación de los parámetros máximos establecidos. Las infracciones se contabilizan por especial, es decir, por tramo contabilizado de una misma etapa.
De una a cinco infracciones dan lugar a diez segundos de penalización por infracción. De seis a diez infracciones, se conceden 30 segundos de penalización por infracción. Si hay más de diez infracciones, no se suman las infracciones individuales, sino que hay una penalización de tiempo de diez minutos.
Sin embargo, también hay tolerancias acordadas con la FIA que dan a los equipos cierto margen de maniobra. Por ejemplo, al aterrizar después de un salto, pueden producirse picos de velocidad por encima del límite durante un breve momento.
