La FIA se ha equivocado, una vez más, en la Fórmula 1 y esta vez ha sido en el Gran Premio de Singapur. Sin embargo, esta vez la Federación ha admitido que el error que tuvieron en las calles de Marina Bay tuvo una clara trascendencia en el resultado de la carrera.
Y es que Max Verstappen, tras los varios incidentes y obstaculizaciones que protagonizó en la sesión de clasificación, no recibió más que una advertencia por parte de la FIA, librándose así de cualquier tipo de sanción.
Y, a pesar de que Max no pudo pasar de la quinta posición en la carrera, el hecho de que se librara de la sanción le permitió escalar posiciones sin mayores problemas, algo que no debería de haber sido así.
Algo que provocó las quejas de muchos equipos y pilotos que aseguraron que Max estaba recibiendo un trato especial. Ahora, días después, Matteo Perini, comisario que estuvo presente en Singapur, ha admitido que Max debió haber sido sancionado con más de tres posiciones en la parrilla de salida del domingo.
Sin embargo, esto no sucedió y no se puede cambiar el pasado. Por ello, Perini asegura que van a intentar que las cosas sean diferentes en este próximo Gran Premio de Japón y asegura, así, que serán más severos a la hora de aplicar las sanciones pertinentes.
