Este 24 de octubre se conmemora el Día Internacional contra el Cambio Climático, relevando el compromiso de diversos sectores por avanzar hacia metas de carbono neutralidad. En el caso de la industria aérea, la meta es alcanzar las cero emisiones netas para el 2050. El uso de flotas sostenibles es una de las medidas ecoamigables más eficaces que está adoptando el sector, ya que realizan un consumo de combustible más eficiente y, de esa manera, se reducen las emisiones de nitrógeno (NOx) y dióxido de carbono (CO2), sin descuidar el confort y el bienestar de los viajeros.
Es el caso de SKY Airline, principal low cost de Perú, con presencia en 9 países y más de 42 destinos en la región; para quien el recambio tecnológico de su flota se erige como su principal aliado para la gestión ambiental. De hecho, es la única aerolínea en la región con una flota compuesta al 100% por aviones con tecnología NEO, que disminuye en aproximadamente 30% las emisiones por asiento y en 50% la contaminación acústica. Actualmente la compañía -además- tiene la flota más nueva de la región, con una edad promedio de 2.8 años.
“Como aerolínea low cost, creemos que nuestra misión es brindar un servicio de transporte rápido y seguro en países donde existen geografías muy complejas, de forma sostenible. Si bien existen diferentes formas de llegar a la carbono neutralidad, estamos convencidos de que el camino debe partir por utilizar la tecnología como aliada. Nuestro primer gran paso fue convertirnos en la primera línea aérea en la región en migrar el 100% de nuestra flota a la tecnología NEO y muy pronto incorporaremos un nuevo modelo A321XLR, con una mayor autonomía de vuelo, reduciendo aún más el consumo de combustible por asiento”, señala Mayra Kohler, gerenta de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad.
Gracias al proceso de modernización de flota, SKY ha podido reducir la intensidad de sus emisiones, al tiempo que garantiza un viaje seguro y cómodo para los pasajeros. Además de esto, la aerolínea viene concentrándose en la optimización de rutas, apoyada de modelos de inteligencia artificial. Gracias a ello, logra una correcta planificación previa del tráfico aéreo para evitar el tiempo de espera al aire, aminorando el impacto al medio ambiente. En los últimos 12 meses, alcanzó una reducción de 16.000 toneladas de CO2, equivalente a las emisiones de 547 vuelos entre Lima y Santiago de Chile.
De esta manera, la industria aeronáutica continúa avanzando hacia un futuro más sostenible de la mano de los avances tecnológicos. SKY Airline, por su parte, reafirma su compromiso con el medio ambiente y su responsabilidad hacia las futuras generaciones al seguir apostando por flotas de última generación, optimización de rutas y la promoción de prácticas de eficiencia energética.