El Sistema de Posicionamiento Global (GPS) es una tecnología de navegación que permite determinar con precisión la ubicación de un dispositivo en la Tierra mediante una red de satélites. Estos satélites envían señales a los receptores GPS presentes en dispositivos como teléfonos móviles, relojes inteligentes y vehículos. Su aplicación va más allá de la localización, ya que contribuye a reforzar la seguridad del conductor y a mejorar su conducta de manejo. Esta tecnología cobra especial relevancia en un contexto de creciente interés por la seguridad, donde, según un reciente estudio de la Sociedad Nacional de Industrias, el 45% de las empresas industriales ha incrementado su inversión en esta área.
Paralelamente, el mercado automotor continúa en expansión, con un crecimiento global de alrededor de diez millones de unidades en 2023, alcanzando un total de 92,7 millones de vehículos vendidos. Ante estos datos, Hunter, líder en soluciones tecnológicas de seguridad, explica cómo el GPS se ha convertido en una herramienta indispensable para conductores y los administradores de flotas que buscan mejorar el control y reducir los riesgos en la conducción.
Funcionalidades y beneficios del GPS
El GPS, impulsado por la telemetría y la Internet de las Cosas (IoT), va más allá de la navegación o la localización en caso de robo, convirtiéndose en una herramienta esencial para la seguridad vial y la gestión eficiente de flotas. Sus principales funcionalidades incluyen el monitoreo en tiempo real, notificaciones de entrada o salida de zonas (geocercas), detección de conductas de riesgo (excesos de velocidad, frenadas bruscas), optimización de rutas, control de desconexión de remolques, alertas de sabotaje, monitoreo de variables críticas (RPM, temperatura de la carga, combustible, presión de llantas, entre otros) y generación de reportes automatizados.
Estos recursos brindan beneficios clave, como mayor seguridad, reducción de costos operativos, conducción más segura, optimización de la eficiencia operativa y toma de decisiones basadas en datos precisos. «Este análisis permite implementar estrategias para optimizar rutas, detectar comportamientos peligrosos y responder oportunamente en caso de incidentes», afirma Flor de María Villón, Subgerente de Pre-Venta, Proyectos y Soporte Técnico de Hunter.
¿Qué datos proporciona el GPS para mejorar la seguridad?
Ubicación: Monitoreo de trayectos y detección de posibles desvíos o comportamientos inusuales en rutas planificadas.
Comportamiento de conducción: Supervisión de la velocidad promedio, giros repentinos, frenados y acelerados bruscos, para mejorar hábitos de la conducción.
Geocercas: Control en tiempo real sobre las rutas permitidas y alertas automáticas en caso de desvíos de rutas seguras o autorizadas.
Medición de combustible: Información precisa sobre el consumo y las reservas de combustible, facilitando la planificación y ahorro.
Tiempo de conducción y paradas: Tiempo de conducción continua y las paradas, lo cual puede ser útil para gestionar la fatiga del conductor, identificar posibles distracciones o evitar el agotamiento.
Alertas de mantenimiento: Basado en la ubicación, datos del computador y los kilómetros recorridos, el GPS puede ayudar a programar el mantenimiento correctivo y preventivo del vehículo, reduciendo el riesgo de fallos mecánicos y mejorando la seguridad general.
Sistemas de identificación: Verificación de la identidad del conductor mediante tecnologías avanzadas como cámaras con inteligencia artificial y llaves electrónicas.
Debido al aumento de la delincuencia y los accidentes de tránsito, es necesario incorporar medidas de seguridad efectivas, como el GPS, para ayudar a reducir estas cifras alarmantes. El GPS en los vehículos es una herramienta que además de reforzar la seguridad de los conductores y pasajeros, contribuye a llevar un mejor control de las operaciones vehiculares.