Estos carros en miniatura marcaron un antes y un después en la industria del juguete. Matchbox fue la empresa que revolucionó la fundición a presión para autos a escala. La posibilidad de tener entre las manos una réplica casi exacta del carro de tus sueños es el anhelo de muchos niños que le gustan los automóviles.
En 1953, el nacimiento oficial de Matchbox hizo realidad ese sueño, con coches de juguete en miniatura que se convirtieron en íconos y marcaron un antes y un después en la industria del juguete. El nivel de detalle de estas piezas resultaba profundamente surreal para la época. Carros diminutos que se fueron perfeccionando con el tiempo para parecerse a los modelos de tamaño real.
Los carros de Matchbox llegan a millones de hogares en todo el mundo
Lo que más destacaba de los carros Matchbox era su detalle. Incluso, años después, perfeccionaron los diseños con versiones que podían abrir sus puertas, el capó, con retrovisores, ruedas que giraban. Un absoluto espectáculo capaz de llamar la atención hasta de los más desentendidos en la materia.
Todas estas características son la respuesta a la gran fama adquirida por los Matchbox y que hoy por hoy aún persiste, entre niños y coleccionistas. Su éxito, por supuesto, comenzó a incentivar la aparición de otras empresas que buscaban hacer la competencia.
¿Cómo nació la icónica marca de miniaturas diecast?
Como ya mencionamos, el primer coche Matchbox vio luz en 1953 en Gran Bretaña. Leslie Smith y Rodney Smith, habían creado en 1947 una pequeña empresa que producía juguetes con modelos fundidos a presión y piezas industriales. Sin embargo, no habían logrado trascender.
Los dos Smith eran amigos de la infancia y desde chicos se habían propuesto sacar adelante un proyecto de fabricación juntos. Ambos servían en la marina inglesa y solo esperaban el fin de la guerra para echar a andar sus ideas. A esta dupla se unió el talentoso ingeniero John (Jack) Odell, quien tenía valioso conocimiento en el área de la fundición.
La carroza en miniatura de la coronación de la reina Isabel II fue la creación que en 1953 rompió el molde, ideada por Jack Odell. Surgió porque en la escuela donde acudía la hija de Leslie, solo permitían juguetes tan pequeños, que pudieran guardarse en una caja de fósforos. Es por ello que hicieron esa réplica diminuta del carruaje y fue la sensación. De allí el nombre de Matchbox, que traducido al español es “cajita de cerillas”.
Modelos icónicos en el camino al éxito
De esta réplica en miniatura de la carroza se vendieron un millón de unidades, y abrió pasó a la fabricación de otros modelos que posicionaron a los carros Matchbox en el mercado. A la lista de creaciones comenzaron a sumarse vehículos que para la época circulaban en las calles de Londres, como el clásico taxi Austin FX3.
Incluso las producciones siguientes fueron las réplicas en miniatura de tractores, camiones y vehículos a vapor de antaño, una serie que fue muy exitosa. Más adelante llegaron las líneas Superfast serie Models of Yesteryear.
La popularidad e internacionalización de la marca los llevaron a ampliar su gama, hasta representar deportivos estadounidenses e imprimir más realismo en los diseños con detalles impactantes. La diversificación de cada gama ubicó a los Matchbox como los carros en miniatura más vendidos del mundo.
La rivalidad con Mattel y los Hot Wheels
El más férreo competidor de los Matchbox fue la estadounidense Mattel y sus Hot Wheels. Aunque el nivel de detalle en los carros no era el mismo, tenían coloridos diseños y pistas de carrera que resultaban llamativas. Aunque Lesney en respuesta diversificó de su gama y la lucha fue cerrada, los problemas económicos en Gran Bretaña pusieron en aprietos a la compañía hasta que finalmente quebró. La marca Matchbox fue vendida en 1982 a Universal Toys.
Actualmente, Matchbox pertenece a Mattel, la misma compañía de los Hot Wheels. Sin embargo, cada uno mantiene su esencia. El legado de los Matchbox continúa tan vigente, que harán otra película inspirada en la icónica línea de juguetes. Se trataría de una película de acción real protagonizada por John Cena.