Audi sigue adelante con su plan para acercarse a los GP previstos para 2025: en Neuburg, sede del departamento de motores, se está terminando de construir la fábrica en la que trabajarán 400 empleados, mientras que en Hinwil está en marcha un sólido plan de contratación para pasar de los 550 empleados actuales a los 800 previstos. También se empiezan a dar los primeros nombres de los pilotos para la temporada de debut: el alemán de Haas parece prioritario, y después uno de los dos franceses de Alpine.
En el programa de Fórmula 1 de Audi reina el silencio. La asociación con Alfa Romeo, que llegará a su fin al final de la temporada, no permite al fabricante alemán (al igual que a Sauber) salir del armario. Seguimos hablando de dos marcas competidoras en el mercado automovilístico. Sin embargo, lejos de los focos, la actividad es frenética, empezando por la sede de Neuburg, una localidad situada a veinte kilómetros de Inglostad. Aquí se encuentra la sede del proyecto de unidad de potencia de Fórmula 1 de Audi, una estructura que ha finalizado en el frente de la construcción, pero que aún está en proceso de instalación.
Aún no se ha alcanzado el objetivo de llegar a los 400 empleados que trabajarán a tiempo completo en el proyecto del motor híbrido, pero la campaña de contratación continúa sin cesar. El programa avanza bajo el control de los directores Adam Baker y Stefan Dreyer, y recientemente se ha puesto en servicio un simulador, cuyo uso (encomendado al ex piloto de Red Bull Neel Jani) servirá principalmente para la gestión de la energía en las distintas condiciones de clasificación y carrera, pero aún queda mucho por hacer.
Trescientos sesenta kilómetros al sur de Neuburg, la otra cara del juego está en la histórica sede suiza de Sauber, en Hinwil. Aquí también está en marcha el programa de contratación, que pretende aumentar el número de empleados de los 550 actuales a los 800 previstos para 2025.
El proceso de transformación de la empresa implica a todas las áreas, y en Sauber se ha recibido con una sonrisa el aumento extra del CapEx (fondo de gasto disponible para infraestructuras fuera del presupuesto límite), que para los equipos más pequeños (Williams, Haas, AlphaTauri y Sauber) se ha ampliado en 20 millones de dólares además de los 45 ya previstos para el cuatrienio 2021-2024.
Sin embargo, sigue habiendo dificultades. La contratación de personal para la Fórmula 1 se ha vuelto muy compleja debido a los largos periodos de espera previstos en los contratos actuales, que oscilan entre doce y veinticuatro meses para las figuras de alto perfil.
El pasado 7 de junio, la escudería anunció la contratación de James Key, que se incorporó al equipo hace unas semanas y también estuvo presente en el Gran Premio de EE.UU., pero la finalización de la plantilla no se completará hasta finales de 2024.
Sauber, a lo largo de esta temporada, también ha empezado a vigilar el mercado de pilotos. Los planes prevén que el tándem se una al equipo Audi una temporada antes de la fecha de debut, en 2026. No es una tarea fácil en manos del director general, Andreas Seidl, y del director del equipo, Alessandro Alunni Bravi, ya que la mayoría de los pilotos punteros no estarán libres en el mercado para la temporada 2025. Más allá del interés que puedan tener o no en el programa de Audi, los actuales pilotos de Mercedes y McLaren más Max Verstappen ya están atados a sus respectivas escuderías, y lo mismo ocurrirá pronto con el tándem de Ferrari, cuya renovación (al menos dos años) se da por hecha.
A lo largo del verano se han ido filtrando rumores de consultas por parte de la cúpula directiva de Audi, y los que parecen más probables en estos momentos son los de un interés mutuo que involucre a Nico Hulkenberg, más uno de los actuales pilotos de Alpine (ambos expiran al final de la próxima temporada) que, según varios insiders, sería Esteban Ocon. No es fácil convencer a un piloto para que abogue por una causa que incluirá una temporada 2025 sin grandes expectativas, pero a la larga un vínculo con un fabricante como Audi puede tener sus recompensas.
El mayor escollo será completar los primeros pasos, imprescindibles cuando se trata de iniciar un programa de Fórmula 1 prácticamente nuevo, pero no exento de expectativas y presión cuando se trata de la presencia oficial en pista de un gran fabricante como Audi. Hará falta tiempo, y un paracaídas preparado para rescatar al equipo en caso de que el debut no sea el mejor. Sin duda, el nombre tiene peso, pero la Fórmula 1 no es un reto fácil para nadie, incluidos equipos emblemáticos que han escrito páginas importantes en la historia del automovilismo.