En línea con su visión de una movilidad más responsable, Audi da un paso firme hacia la sostenibilidad mediante el fortalecimiento de su estrategia de economía circular. Con el objetivo de reutilizar materiales siempre que sea viable técnica, ecológica y económicamente, la marca alemana implementa una solución pionera: el reciclaje estratégico y rentable de vehículos al final de su vida útil.
Desde 2023, Audi ha venido desarrollando el programa MaterialLoop, enfocado en recuperar materias primas secundarias postconsumo de alta calidad, como el acero, para reinsertarlas en su proceso productivo. En colaboración con su socio TSR Resource, Audi se convierte en el primer fabricante automotriz en aplicar un modelo de reciclaje económicamente viable para vehículos fuera de circulación, asegurando así la trazabilidad y reutilización de componentes clave en nuevos autos.
Además, a partir de este año, la marca pondrá a disposición miles de vehículos de preproducción para ser reciclados. Estos serán triturados y procesados por TSR Resource para extraer materiales reutilizables de alta calidad. El material recuperado será gestionado mediante una cuenta digital de materiales, un sistema virtual donde se acredita el acceso a estos recursos para que proveedores autorizados participen en licitaciones exclusivas.
Este sistema permite a Audi acceder a materias primas recicladas de forma estable y predecible, evitando la volatilidad de precios en los mercados globales. Así, no solo refuerza su independencia de las fluctuaciones del mercado, sino que fortalece su cadena de suministro y promueve una producción automotriz más sostenible, sin comprometer calidad ni costes.
“El reciclaje tiene un potencial enorme. Trabajamos constantemente para aumentar la proporción de materiales reciclados en nuestros vehículos. Con la cuenta digital de materiales, Audi es pionera en adquirir recursos valiosos de forma más independiente del mercado. La sostenibilidad y la economía pueden ir de la mano”, destaca Renate Vachenauer, responsable de Compras de Audi AG.
Una estrategia con visión de futuro
El compromiso de Audi con el reciclaje no es nuevo. La marca ya lo ha demostrado con iniciativas como GlassLoop y SteelLoop, que integran vidrio y acero reciclado en componentes como los parabrisas del Audi Q4 e-tron o la sección exterior del techo, del más reciente lanzamiento local, el Audi Q6 e-tron. Ahora, Audi da un paso más allá: ya no se trata solo de reutilizar materiales, sino de cerrar el ciclo completo dentro de su propia cadena de producción.
La estrategia de economía circular de Audi no solo busca eficiencia, sino también resiliencia ante posibles crisis externas, como disrupciones en la cadena de suministros. Al integrar materiales reciclados desde el diseño y planificación de sus vehículos, Audi demuestra que es posible mantener estándares de calidad premium mientras se reduce el impacto ambiental y se optimizan los costos a largo plazo.
Un modelo colaborativo para toda la industria
Este sistema no funciona en aislamiento. Requiere de una colaboración activa entre fabricantes, socios de reciclaje y proveedores. Audi suministra los vehículos, TSR Resource los procesa, y los proveedores acceden a materiales reciclados certificados para usarlos en componentes automotrices. Esta sinergia genera beneficios compartidos: acceso a materiales de calidad, reducción de residuos y mayor estabilidad en las condiciones de compra.
“Estamos encantados de trabajar con Audi para establecer otro hito importante para la economía circular en la industria automotriz. Este proyecto demuestra el poder de las alianzas industriales para construir cadenas de suministro más sólidas y sostenibles”, afirma Christian Blackert, director de TSR Resource.
Innovación con impacto ambiental y económico
La implementación del modelo de cuenta digital de materiales no solo es una innovación tecnológica, sino también una herramienta que posibilita decisiones estratégicas más sostenibles y rentables. Audi planea ampliar este enfoque a otras materias primas que formen parte de sus vehículos actuales y futuros.
El uso de materiales secundarios postconsumo permite a la marca mantener recursos valiosos dentro del ciclo productivo, reduciendo la necesidad de extraer nuevas materias primas y, con ello, disminuyendo significativamente su huella ambiental.
Con esta iniciativa, Audi confirma su compromiso con una industria automotriz más verde, sin dejar de lado la rentabilidad ni la excelencia técnica. El futuro de la movilidad, según Audi, pasa por una producción consciente, responsable e inteligente, donde cada componente puede tener más de una vida útil.