Los autos eléctricos han tomado gran popularidad y espacio en el mercado. Sin embargo, su consolidación en la preferencia de los usuarios ha demorado más de lo deseado por los fabricantes debido a distintos factores. Una de las razones principales está vinculada a lo económico, y es que ensamblar un auto eléctrico representa una importante inversión que luego se refleja en el monto de venta final.
Uno de los elementos que más incide en el precio de un vehículo sin emisiones o híbrido es precisamente la batería. Los costos de producción de este componente clave son elevados y, aunque han caído poco a poco con el paso de los años, aún tienen un importante impacto en la comercialización de este tipo de coches. Sin embargo, todo apunta a que esta realidad dejará de ser una limitante para la consolidación de la electromovilidad.
Estudio proyecta una baja significativa en el precio de las baterías
Según un estudio de Goldman Sachs Research, el precio de las baterías para autos eléctricos se desplomará un 50% para 2026. Aunque los costos de las baterías ya venían en descenso, este porcentaje de reducción que proyecta el banco de inversión dejaría niveles que rondan los 80 dólares por kWh. Para el cierre de este 2024 se espera que el promedio global de las baterías de automóvil sea de 111 dólares por kilovatio-hora, en 2023 fue de 149 dólares y en 2022 se ubicó en $153 dólares por kWh.
Las razones de esta caída, sostenida en los precios promedios de los paquetes de baterías, radica en una estructura de diseño más práctica como las tecnologías cell-to-pack. Igualmente, el descenso en los precios de la materia prima de metales verdes que mayoritariamente las componen como el litio y cobalto. Asimismo, toman peso los avances tecnológicos que han permitido aumentar la densidad energética de este componente.
En una industria cada vez más innovadora, estratégica y cambiante, está caída en el valor de las baterías de autos eléctricos, sí que tendrá impacto. Algunos análisis apuntan que se reflejará en un mercado más competitivo respecto a los coches a combustión. Lo que se traduce en costos más parejos sin que el negocio de los eléctricos deje de ser rentable.
Nikhil Bhandari, codirector de Investigación de Recursos Naturales y Energía Limpia de Asia-Pacífico de Goldman Sachs Research, lo ratifica. “Dado que todavía esperamos una rápida caída en los precios de las baterías, y asumiendo un entorno de precios del petróleo todavía relativamente elevado, creemos que, en mercados como el de EE. UU., la paridad del costo total de propiedad llegará a partir de 2026”.
El litio domina el mercado de las baterías de eléctricos
El desarrollo en masa de baterías en estado sólido, parece que aún tiene que esperar unos años más, por la complejidad de producción. Por ahora, el mercado está dominado por baterías de litio que siguen mejorando su eficiencia y seguridad, aunque siguen teniendo una autonomía corta en comparación con lo que se espera. Las baterías de estado sólido se están perfeccionando, sobre todo en fabricantes chinos, lo que puede generar una gran ventaja para las marcas de ese país.
Lo que se puede esperar, es que, cada vez, los costos de los vehículos eléctricos sigan bajando de precio. A pesar de algunos incentivos gubernamentales en Estados Unidos, los autos a combustión siguen dominando el mercado, lo que sigue siendo una dura batalla para el cambio a la electromovilidad.