Japón estudia los secretos del bajo costo de los carros eléctricos chinos

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En un seminario organizado por la Oficina Central de Industria y Comercio de Japón, más de 70 empresas japonesas de repuestos para carros exploraron a fondo las estrategias de los fabricantes chinos de vehículos eléctricos (EV).

La sesión incluyó una visita a una planta de desmantelamiento en Gifu, donde los participantes analizaron modelos como el BYD Yuan Plus, el NIO ET5 y el Tesla Model Y, con el objetivo de comprender cómo logran sus competitivos precios y su eficiencia en la fabricación.

Entre los modelos desmantelados para el análisis, destacó el SUV eléctrico de BYD Yuan Plus. Este automotor, lanzado en febrero de 2022, superó las 300.000 unidades vendidas a nivel mundial hasta marzo de 2023, con un precio de partida en China de 140.000 yuanes (aproximadamente €18.200).

BYD Yuan Plus pruebas conducción autónoma

Integración y verticalización: las claves del éxito chino

Así las cosas, el costo tan ajustado del Yuan Plus se debe a varias innovaciones de diseño y fabricación, como el sistema “E-Axle”, que combina motor, inversor, reductor, cargador y convertidores en un solo módulo. Esta integración no solo reduce la cantidad de piezas y el peso, sino también los costos de producción.

Kenichi Ito, gerente de Sanyo Trading, la compañía a cargo de la planta de desmantelamiento, mencionó que “los fabricantes chinos son muy eficientes a la hora de reducir costos, enfocándose solo en las piezas que requieren mayor inversión y simplificando el resto”.

Además, BYD destaca por fabricar la mayoría de los componentes de sus carros, incluidas sus propias baterías, minimizando su dependencia de proveedores externos. Esta “verticalización” permite a la marca optimizar los costos y beneficiarse de economías de escala, utilizando componentes comunes en distintos modelos.

Sho Kato, gerente de Nissin Seiki, expresó su asombro por la eficiencia de estos autos: “nos sorprendió el reducido número de componentes. Esta integración facilita el proceso de fabricación y genera grandes ahorros”. Aunque, según Kato, aún hay áreas a mejorar, como el sellado de la batería, el enfoque chino está captando la atención de la industria japonesa.

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