En BMW también tienen en mente electrificar por completo su gama de vehículos de la división deportiva M y la simulación electrónica de una caja de cambios de doble embrague es una de las opciones que permitiría mantener en cierto modo sensaciones similares a las de conducir los actuales modelos con motor de combustión.
Los futuros modelos 100% eléctricos de la división M de BMW no llegarán hasta que sean capaces de rendir y ofrecer unas sensaciones tan deportivas o más que vehículos como los actuales BMW M3 y BMW M4 con mecánicas de combustión.
Mientras buscan soluciones y alternativas, sobre la mesa queda la posibilidad de utilizar un simular de caja de cambios de doble embrague, similar la transmisión N e-shift que monta el recientemente presentado Hyundai Ioniq 5 N.
Según Frank van Meel, jefe de la pasional división M, lo que se busca es que se conduzcan como un auténtico M. De ahí que la alternativa de Hyundai, que simula una caja de cambios automática de ocho velocidades, que en el caso del eléctrico en realidad son virtuales, permitirá al conductor subir y bajar marchas con las levas situadas tras el volante.
Transmitir esa «sacudida» y las distintas vibraciones y feedback de los cambios tradicionales es algo que se sigue investigando en BMW y que podríamos ver por primera vez en «dos o tres años».
El propio Meel habló de la llegada de los próximos BMW M3 y M4 para 2027 o 2028, en todo caso antes de que termine la década. Esto deja abierta la posibilidad a que estos modelos sean los que estrenen esta opción, o incluso a que la nueva generación de M3 y M4 siga siendo de combustión y haya que esperar al siguiente ciclo vital para encontrar mecánicas ‘cero emisiones’.