Sergio Pérez llega al Circuito de Barcelona-Catalunya con la imperiosa necesidad de llevarse un buen resultado y cortar con la secuencia negativa que comenzó hace un mes en el Gran Premio de Emilia Romagna.
En aquella visita a Imola, el piloto mexicano no pudo entrar en la Q3 del sábado por primera vez esta temporada al ubicarse 11º, y el domingo solo pudo remontar tres posiciones para cruzar la meta octavo en una pista muy difícil para los adelantamientos.
La situación fue a peor en Mónaco, cuando solo se clasificó 18º y luego se vio envuelto en un accidente con el Haas de Kevin Magnussen en los primeros metros de la carrera, mientras que en Canadá volvió a quedar eliminado en la Q1 (16º) y el domingo nunca pudo avanzar en las condiciones cambiantes de la carrera antes de retirarse por una salida de pista.
«Checo» Pérez arrastrará consecuencias de la competencia de Montreal a la cita de España, ya que los comisarios le aplicaron tres puestos de penalización en la parrilla de salida por haber conducido con su coche en una situación insegura hacia el garaje tras su choque con las barreras en la curva 6.
Con todo esto, el de Guadalajara es el primero en reconocer que precisa de un resultado positivo en la visita de la Fórmula 1 a Barcelona.
«Al llegar a España, sé que necesito un buen fin de semana después del desastre de Canadá. A veces te ves obligado a reiniciar un poco y eso es lo que hemos hecho desde la última carrera», dijo Pérez en el comunicado oficial de Red Bull previo al GP de España.