Red Bull Racing ha sido la fuerza dominante en la F1 desde el comienzo de la era del efecto suelo en 2022, ganando los dos títulos de pilotos con Verstappen y los dos de constructores hasta ahora.
Pero ha sido el gran número de victorias del neerlandés en este período lo que ha subrayado su dominio, habiendo batido dos veces el récord de victorias en una sola temporada de camino a sus títulos.
Sin embargo, la actual campaña presenta un panorama muy diferente a mitad de camino, a pesar de que Verstappen sigue en lo más alto de la clasificación. Los dos pilotos de Ferrari, los dos de Mercedes y el de McLaren, Lando Norris, han logrado ganar, y las dificultades de Sergio Pérez abren la puerta a una batalla por el título de constructores.
La normativa de la escala móvil de desarrollo de la F1 se introdujo junto con el límite presupuestario en un intento de igualar las condiciones, y el último equipo del campeonato dispone de un 45% más de tiempo de pruebas que la escudería ganadora del título, con cada una de las 10 escuderías separadas por incrementos del 5%.
Cuando se le preguntó si esta normativa estaba empezando a afectar al dominio de Red Bull, Verstappen respondió: «Naturalmente, siempre ayudará tener más tiempo, pero así son las reglas, ¿no? Para intentar frenar al equipo ganador».
