El Instituto de Seguros para la Seguridad Vial de Estados Unidos, IIHS en inglés, dijo que la tecnología de conducción automatizada todavía no mejora la seguridad de los vehículos lo suficiente, como nos lo han hecho pensar. Estas funciones se encuentran en los llamados paquetes o suites de asistencias a la conducción, que cada vez son más grandes.
Aunque hay que decir que, parte de estas nuevas funciones tecnologías fueron diseñadas específicamente para evitar accidentes y son las que, hasta ahora, han mostrados resultados favorables. En este sentido una conclusión alegórico, es que esta automatización parcial de la conducción parece conveniente, como las “supuestas ventajas de la electrificación”.
Para darle argumentos a su posición, el IIHS realizó un estudio donde se pusieron a prueba modelos de BMW y Nissan de entre cinco y 11 de antigüedad, con y sin paquetes de asistencias. La principal conclusión fue que, las reclamaciones por daños materiales en accidentes, no se redujeron cuando las nuevas tecnologías automatizadas intervenían.
¿Qué tan útiles son las asistencias a la conducción?
“Todo lo que estamos viendo nos indica que la automatización parcial es una característica de conveniencia, como las ventanas eléctricas o los asientos con calefacción, en lugar de una tecnología de seguridad”, reafirmó después del estudio, el presidente del IIHS, David Harkey.
Sin embargo, frente a las pruebas realizadas hay que tener en cuenta que, por ejemplo, el sistema de frenado autónomo y las alertas de colisión frontal se activan automáticamente de forma predeterminada. Y así ocurre con la mayoría de funciones. Siendo así, no es posible saber cuántos choques ocurrieron con las funciones activadas, respecto a los carros evaluados que no contaban con ningúno de estos sistemas.
Como lo dijimos, dentro de los mismos paquetes de seguridad que ofrecen actualmente las marcas, se encuentran tecnologías para evitar colisiones y funciones de autonomía parcial. Entre las primeras se pueden reconocer, frenado autónomo de emergencia, alerta de salidad de carril y monitoreo de punto ciego. Control de crucero, pertenece al segundo grupo.
Efectivamente, suena posible que las ‘fabulosas’ suites de asistencias que nos venden las automotrices sean una cuestión de marketing. Es por eso que las organizaciones que prueban la seguridad de vehículos nuevos como NCAP y el propio IIHS, incluyen un ítem relacionado a este apartado, demostrando que las funciones de seguridad pasiva y activa siguen siendo las más eficientes.