Comienza el día con ese gusto que solo un vochero experimenta al saber que hoy es día de car show y que hay que manejar nuestro bienamado Volkswagen, en esta ocasión por espacio de dos a dos horas y media para recorrer una distancia de casi 150 millas, pero esos detalles poco importan. El chiste es viajar, escuchando tu música favorita a bordo de tu Volkswagen (y pidiéndole a Dios que no te vaya a fallar), recorrer esa distancia para llegar a un evento como el Nor Cal Dub Affair.
Como ya es normal, durante el camino te vas a encontrando con otros vocheros a quienes saludas, no importando el club al que pertenecen, todos vamos en camino.
Llegando al Nor Cal Dub Affair
Finalmente llegamos a este evento vochero que se celebra en San Juan Bautista, California. No encontramos con una considerable cantidad de autos, todos de la marca Volkswagen o Porsche y uno que otro modelo enfriado por agua. Llegó el momento de encontrar un espacio para armar nuestro campamento.
En este evento vochero californiano pudimos apreciar excelentes autos, de todo tipo, desde rusties, hasta modelos con impecable pintura, modificados, stock, y un par de vochos Split Window, así como una Split Bus de trabajo (jirafa).
Pero sin duda, una de las cosas más agradables de este y otros eventos vocheros es poder saludar a la banda. Ese es el verdadero plato fuerte de un Bug In.
En el Nor Cal Dub Affair se llevó a cabo una gran rifa de artículos donados por algunas tiendas especializadas en accesorios, así como por parte de algunos vocheros entusiastas.
Fue un evento calificado, así que se entregaron trofeos a distintas categorías y por supuesto, también se contó con música en vivo para amenizar la convivencia.
Y como todo evento vochero que se respete, no faltó el agua bendita (muchas cervezas).
En medio de un ambiente de cortesía y camaradería las horas se pasan como minutos y así pasó en el Nor Cal Dub Affair. Es hora de partir y decir: “hasta el próximo evento, maneja con cuidado”, y no falta quien te diga: “avisas cuando llegues”.