El Volkswagen Kommandeurswagen Tipo 187, fue un vehículo militar ligero de la Segunda Guerra Mundial, que tomó como base la ingeniería del vocho y que, a diferencia del Kübelwagen y del Schwimmwagen, conservó mucho del diseño original del Auto del Pueblo alemán.
En 1934, Adolf Hitler encargó a Ferdinand Porsche, un reconocido ingeniero automotriz, la creación de un «automóvil del pueblo» (Volkswagen) que fuera asequible y eficiente. El diseño del Tipo 1, con su motor trasero refrigerado por aire y su chasis simple, se adaptó perfectamente para su uso militar.
En 1938, se desarrolló el prototipo del Tipo 82 (Kübelwagen), un vehículo todoterreno ligero con tracción trasera y una carrocería abierta. El diseño era simple y robusto, con un parabrisas plegable, capota desmontable y cuatro puertas. La producción comenzó en 1940 y se mantuvo hasta el final de la guerra en 1945, con un total de más de 50,000 unidades fabricadas.
Las variantes del Kommandeurswagen
El Kommandeurswagen era un vehículo ligero y versátil. Su motor de 1.1 litros refrigerado por aire producía 25 caballos de fuerza, lo que le daba una velocidad máxima de 80 km/h. El vehículo podía transportar hasta cuatro soldados y 250 kg de carga.
Además del modelo estándar, se produjeron varias variantes. Entre las más notables se encuentran:
Tipo 87: Este modelo tenía tracción a las cuatro ruedas, lo que lo convertía en un vehículo más versátil para terrenos difíciles.
Tipo 166 Schwimmwagen: Esta versión anfibia podía navegar a una velocidad de 10 km/h.
Tipo 82E: Una versión con motor eléctrico desarrollada hacia el final de la guerra.
El Kommandeurswagen fue utilizado en todos los frentes de la guerra, desde el norte de África hasta el frente oriental. Su capacidad todoterreno le permitió a las tropas alemanas moverse con rapidez y eficacia en terrenos difíciles.
La controversia
Al igual que otros vehículos militares de la época, el Volkswagen Kommandeurswagen Tipo 187 está asociado con el régimen nazi. Sin embargo, es importante recordar que el vehículo fue diseñado y construido por ingenieros y trabajadores alemanes, muchos de los cuales no apoyaban el nazismo.
Debido a los pocos ejemplares que sobrevivieron al conflicto armado, este es uno de los vehículos más buscados por los coleccionistas de automóviles militares. Algunos ejemplares se encuentran en museos y exposiciones, mientras que otros siguen en manos privadas.